Bienvenido!

Si alguna vez me ves llorar no es por falta de alegría, recuerda que dentro de mí hay un infinito que ha muerto antes, y ahora puedo ver claramente ese infinito en ti y todavía no he aprendido a dejarlo ir.

La soledad es una oportunidad para sanar el dolor causado. Las lágrimas que caen por mi rostro son luz y sombra de la vida que queda en mi.

Yo me entrego, te lo doy todo, pues considero mas importante el amor primero que todo lo demás. Si alguna vez me ves llorar por favor no te lo tomes personal, es así la voluntad divina de Dios, que a través de mi te ha venido a curar.

No sólo deje atrás el lugar en el que me gustaba vivir, también me fui de ti, de todos. De sus besos, de las miradas tiernas que me distraen tanto.

Yo lo sabía en ese momento, era una señal, la vida me enseña a amar, la vida me cobra el tiempo que me queda, la única salida es el amor incondicional.

F. G. G.